Lo que necesitas saber:
El PSG consiguió su primer título y firmó la mayor goleada en la historia de una Final de Champions League.
Un estadio repleto, dos equipos con estilos opuestos y una ciudad que esperaba campeonatos. Al terminar los 90 minutos, la final de la Champions League 2025 fue una arrastrada, pero sí tuvo momentos que marcaron una noche histórica en el Allianz Arena.
Una cábala: Múnich, la nueva capital de los campeones
Si hay una ciudad donde nacen campeones, esa es Múnich. Desde hace décadas, cada final jugada ahí ha sido testigo de clubes levantando su primera Orejona.
Pasó primero con el Nottingham Forest en 1979, el Marsella en 1993 y el Borussia Dortmund en 1997. Luego, en 2012, el Chelsea se sumó a la lista en el Allianz Arena… y ahora, en 2025, el PSG lo hizo también.
Cinco finales. Cinco campeones inéditos. Parece que Múnich no perdona: si juegas una final ahí y no tienes Champions, te la llevas.
Linkin Park: ¿El futbol y los shows musicales?
La UEFA nos emocionó desde hace varios meses tras anunciar la presentación de Linkin Park previo a la Final de la Champions League. Sin embargo, lo que pintaba como una presentación espectacular, terminó siendo un show deslucido a pesar de que escuchamos rolas como: The Emptiness Machine, In The End, Numb y Up From the Bottom para cerrar.
La banda, ahora con Emily Armstrong, nomás’ no terminó de prender al público del Allianz Arena.
Aunque el público se encendió un poco con un violinista tocando Seven Nation Army, la realidad es que nos hizo pensar si estos shows musicales en el estadio —tan exitosos en un Super Bowl— nomás no están destinados para el futbol europeo.
El Inter jamás salió del vestuario
Apenas nos acomodamos con la botana y el PSG abrió el marcador tras una jugada colectiva que terminó en los pies de Achraf Hakimi. Solo 12 minutos le bastaron al equipo de Luis Enrique para ponerse en ventaja.
Ocho minutos después del primer trancazo, William Pacho se aventó una recuperación espectacular que inició el contragolpe del PSG y el segundo gol de los parisinos, que aunque fue de Désiré Doué, bien se lo podemos apuntar al ecuatoriano.
Désiré Doué y la noche de su vida
Dos goles y una asistencia en una Final de Champions League… ¡con 19 años!
Un par de momentos que marcaron la final de la Champions League 2025. Désiré Doué no solo se ganó su lugar a pulso en el equipo de Luis Enrique, sino que se convirtió en la figura de la Final de la Champions League. El francés se paseó como quiso por toda el área del Inter y encima festejó uno de sus goles como Kylian Mbappé.
¡Vaya joyita el francés!
El momento más emotivo: Luis Enrique, su hija y la promesa cumplida
Luis Enrique llegó al PSG con una idea clara: construir desde abajo sin importar la presión mediática. Pero más allá de la táctica, había una motivación profunda: su hija Xana, quien falleció en 2019 a causa de un osteosarcoma.
En varias entrevistas, el técnico español mencionó que dirigir con pasión es una forma de honrar su memoria. Por eso, la imagen de Luis Enrique en el centro del campo con la bandera representa una promesa cumplida en la cima del fútbol europeo.
¡Lo lograste, Luis Enrique!
El campeón, la historia y el futuro
Con este triunfo, el PSG escribe una nueva página en la historia de la Champions League.
Después de tantos años quedándose cerca, la tan soñada Orejona por fin llega a París. No fue con figuras rimbombantes ni con chequeras desbordadas. Fue con un equipo joven, ordenado y liderado por un entrenador que transformó el dolor en fuerza.
Luis Enrique tomó las riendas tras la pérdida más dura de su vida, apostó por un nuevo estilo, y hoy le devolvió la gloria a un club que siempre la buscó pero nunca la encontró.
Más allá del título, esta final nos dejó una historia de resiliencia, un equipo que encontró su identidad, y un París que, ahora sí, es la ciudad del futbol europeo.
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